El
gobierno de El Salvador instó a las autoridades de Venezuela y Colombia
a resolver a través del diálogo la problemática en su frontera común.
Mediante
un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno
salvadoreño expresó que "observa con mucha preocupación la situación que
se ha generado en una parte de la frontera de Colombia y Venezuela".
Al mismo tiempo, les hizo un fraterno llamado a realizar los mayores esfuerzos para arribar, en el corto plazo, a soluciones sostenibles y evitar con ello mayores consecuencias en la vida de la población de las zonas fronterizas, sobre la base los fuertes y estrechos lazos de amistad entre esos dos pueblos.
El Salvador, un país altamente creyente del diálogo y de la solución pacífica de los conflictos, confía en que sólo de esta manera puede lograrse en el corto plazo, superar las diferencias y llevar tranquilidad a los habitantes de ambos países, refiere el comunicado.
La diplomacia colombiana sufrió un revés el lunes, cuando la Organización de Estados Americanos (OEA) rechazó convocar una reunión de cancilleres solicitada por Bogotá, para tratar denuncias de "violación de derechos humanos" en la crisis.
La tensión entre Bogotá y Caracas aumentó el 19 de agosto con el cierre de pasos fronterizos por el gobierno venezolano, tras un ataque a militares de su país durante una operación anticontrabando, atribuido a paramilitares colombianos.
Al mismo tiempo, les hizo un fraterno llamado a realizar los mayores esfuerzos para arribar, en el corto plazo, a soluciones sostenibles y evitar con ello mayores consecuencias en la vida de la población de las zonas fronterizas, sobre la base los fuertes y estrechos lazos de amistad entre esos dos pueblos.
El Salvador, un país altamente creyente del diálogo y de la solución pacífica de los conflictos, confía en que sólo de esta manera puede lograrse en el corto plazo, superar las diferencias y llevar tranquilidad a los habitantes de ambos países, refiere el comunicado.
La diplomacia colombiana sufrió un revés el lunes, cuando la Organización de Estados Americanos (OEA) rechazó convocar una reunión de cancilleres solicitada por Bogotá, para tratar denuncias de "violación de derechos humanos" en la crisis.
La tensión entre Bogotá y Caracas aumentó el 19 de agosto con el cierre de pasos fronterizos por el gobierno venezolano, tras un ataque a militares de su país durante una operación anticontrabando, atribuido a paramilitares colombianos.
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