Condenan asesinato de líder de lisiados de guerra en El Salvador

Condenan asesinato de líder de lisiados de guerra
La Secretaria Nacional de Veteranos y Veteranas de Guerra del FMLN condenó enérgicamente el secuestro y asesinato de Israel Quintanilla, presidente de la Asociación de Lisiados y Lisiadas de Guerra de El Salvador (Alges), y de su hijo Carlos Alberto Zavala.

Asimismo, expresó su solidaridad con la familia de ambos y con los miembros de esta organización al tiempo que exigieron "la investigación, captura y castigo ejemplar para los hechores materiales e intelectuales de este vil y cobarde asesinato". Subrayó a través de un comunicado que el Sector de veteranos de Guerra del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) continúa firme en la lucha contra toda forma de ataque y agresión a los intereses del pueblo salvadoreño.

"Desde siempre, nos hemos enfrentado a la voracidad de los grandes empresarios y terratenientes que niegan la justicia social al pueblo, a lo cual se suma también la agresión de los grupos delincuenciales contra la gente humilde y trabajadora", enfatizó.

La Secretaría de veteranos recalcó que "fuerzas oscuras y perversas están confabuladas y son responsables de estos hechos criminales, al negar el apoyo al Gobierno de El Salvador y los recursos necesarios para el combate de la delincuencia organizada que azota nuestro país".

Acusaron a la Sala de lo Constitucional y a la Fiscalía General de la República de ser corresponsables del ataque al proceso de democratización del país por tolerar y pretender ocultar la corrupción del sistema judicial y otorgarle poder a los jueces corruptos confabulados con la delincuencia.

También señalaron al partido Alianza Republicana Nacionalista y a su fracción legislativa de formar parte de la estrategia reaccionaria que intenta hundir en la violencia y la inseguridad a El Salvador con el propósito de recuperar el poder.

Asimismo, llamó a la militancia del FMLN, a las fuerzas democráticas y al movimiento social, a cerrar filas contra todo ataque a las conquistas realizadas por la lucha del pueblo salvadoreño.

Los cuerpos de Quintanilla y Zavala fueron encontrados con señales de tortura y baleados, entre la noche del lunes y la mañana del martes en el río San Jerónimo de Tecoluca, departamento de San Vicente, 67 kilómetros al suroeste de San Salvador. Su familia perdió contacto con ellos el 1 de mayo.