Más de 500 mil personas marcharon hoy en El Salvador para unirse a favor de una vida libre de violencia de todo tipo y a favor de la paz y la justicia.
También en las cabeceras departamentales los salvadoreños residentes expresaron sus deseos de construir un país seguro.
"Este es un día hermoso, las calles de El Salvador se vistieron de amor que es el signo de la paz", afirmó el presidente Salvador Sánchez Cerén, quien se sumó a la iniciativa.
El jefe de Estado aseguró en su mensaje al pueblo salvadoreño que esta batalla contra la inseguridad es necesaria darla en el amor, en el restablecimiento de las relaciones de amistad en la familia.
Instó a rescatar las comunidades para convivir en armonía y arrancar los odios de los corazones, ser tolerantes y saber comprender que todos son indispensables.
"Quiero expresar mi reconocimiento al pueblo salvadoreño que este 26 de marzo se ha unido a esta gran marcha nacional por la vida la paz y la justicia", expresó.
Calificó de histórica la movilización, una iniciativa de todos los sectores de la sociedad salvadoreña representados en el Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia.
El mandatario felicitó especialmente a la juventud por ser el caudal de fuerza y de vida de esta nación centroamericana y evocó a Monseñor Romero, cuyo legado "alienta nuestro deseo de construir un país en paz y en armonía".
Anunció que próximamente su gobierno presentará la ley de reinserción de pandillas y prevención de personas en riego, que espera sea aprobada en la Asamblea Legislativa.
Reconoció el trabajo de agentes policiales, miembros de la Fuerza Armada, fiscales y jueces que han entregado su preciada vida en defensa de la ciudadanía y la tranquilidad de la familia.
Ratificó la voluntad de su gobierno para que no quede ningún crimen en la impunidad, así como el compromiso para mejorar la atención y acompañamiento a los familiares de las víctimas.
Sánchez Cerén, quien está al frente del Consejo de Seguridad Ciudadana, aseguró que se aplicará la ley con firmeza para derrotar la delincuencia de cualquier tipo.
"También estaremos abiertos a trabajar por el desarrollo y el bienestar del país y con aquellos que abandonen el camino del odio y la oscuridad", enfatizo el gobernante. Recalcó que esta marcha también "es una declaración de lucha contra cualquier tipo de violencia hacia la mujer".
"Este día queremos reafirmar que no vamos a ceder ni un solo espacio a la delincuencia", subrayó y exhortó a todos a ser agentes activos y protagónicos de la paz porque se trata de una lucha en la cual ganarán todos los salvadoreños unidos.
En el acto central enviaron mensajes de paz estudiantes, representantes de la iglesia evangélica y el obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez.
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