El antiterrorista Antonio Guerrero, quien desde hace 16 años permanece preso injustamente en Estados Unidos junto a otros dos luchadores también cubanos, agradeció las muestras de solidaridad del pueblo salvadoreño hacia la causa de Los Cinco.
Tony, como le llaman su familia y amigos, transmitió vía telefónica y a través de la embajada de Cuba y Prensa Latina, su gratitud por el apoyo que desde esta nación se ha expresado a la lucha por su liberación y de sus hermanos.
Comentó a la embajadora, Iliana Fonseca, que había conocido a muchos salvadoreños con quienes compartía numerosas causas, por lo que considera que El Salvador es un pueblo hermano.
También intercambió con Prensa Latina sobre el espíritu de lucha que los inspira a resistir las condenas injustas por las que permanecen desde 1998 en prisión.
Antonio Guerrero fue encarcelado hace 16 años, junto a Ramón Labañino, Gerardo Hernández, René González y Fernando González, por evitar que grupos de la ultraderecha radicados en Miami ejecutaran acciones terroristas contra el pueblo cubano.
Fernando y René ya están en Cuba tras cumplir 15 años de cárcel por delitos que no cometieron.
Esta semana la Coordinadora Salvadoreña de Solidaridad por Cuba realizó su V congreso, al que fue invitada Mirta Rodríguez, madre de Antonio.
Durante su estancia aquí recibió el apoyo de los miembros que integran la organización, del presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, del secretario general del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, y de la filas del partido.
En especial, recibió la solidaridad del jefe de Estado, Salvador Sánchez Cerén y de la Primera Dama, Margarita Villalta.
Mirta llevó a El Salvador la verdad sobre Los Cinco, como se le conoce al caso, para dar a conocer las injusticias que se cometieron durante todo el proceso judicial y las desmesuradas penas impuestas como las dos cadenas perpetuas más quince años a Gerardo Hernández.
Desde los 66 años comenzó la lucha por la liberación de sus hijos, como llama a los cinco antiterroristas cubanos, y a sus 82 años aún quedan tres en prisión y los recursos judiciales para revocar las injustas condenas casi agotados.
Mirta recabó la sensibilidad de los salvadoreños para hacer llegar a las más diversas voces, en especial al presidente Barack Obama, todas las arbitrariedades cometidas en el juicio y los sobrados argumentos por los cuales Los Cinco deben estar libres ya.
Comentó a la embajadora, Iliana Fonseca, que había conocido a muchos salvadoreños con quienes compartía numerosas causas, por lo que considera que El Salvador es un pueblo hermano.
También intercambió con Prensa Latina sobre el espíritu de lucha que los inspira a resistir las condenas injustas por las que permanecen desde 1998 en prisión.
Antonio Guerrero fue encarcelado hace 16 años, junto a Ramón Labañino, Gerardo Hernández, René González y Fernando González, por evitar que grupos de la ultraderecha radicados en Miami ejecutaran acciones terroristas contra el pueblo cubano.
Fernando y René ya están en Cuba tras cumplir 15 años de cárcel por delitos que no cometieron.
Esta semana la Coordinadora Salvadoreña de Solidaridad por Cuba realizó su V congreso, al que fue invitada Mirta Rodríguez, madre de Antonio.
Durante su estancia aquí recibió el apoyo de los miembros que integran la organización, del presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, del secretario general del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, y de la filas del partido.
En especial, recibió la solidaridad del jefe de Estado, Salvador Sánchez Cerén y de la Primera Dama, Margarita Villalta.
Mirta llevó a El Salvador la verdad sobre Los Cinco, como se le conoce al caso, para dar a conocer las injusticias que se cometieron durante todo el proceso judicial y las desmesuradas penas impuestas como las dos cadenas perpetuas más quince años a Gerardo Hernández.
Desde los 66 años comenzó la lucha por la liberación de sus hijos, como llama a los cinco antiterroristas cubanos, y a sus 82 años aún quedan tres en prisión y los recursos judiciales para revocar las injustas condenas casi agotados.
Mirta recabó la sensibilidad de los salvadoreños para hacer llegar a las más diversas voces, en especial al presidente Barack Obama, todas las arbitrariedades cometidas en el juicio y los sobrados argumentos por los cuales Los Cinco deben estar libres ya.
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